Artículo publicado en la revista Mainhardt,104.
Editada por Associació Amics de Mainhardt,
de Alcalà de Xivert

La Cultura también importa

Para poder analizar la política cultural de un municipio hay un indicador que no falla: el dinero Cuánto gastas o inviertas en cultura será una de las cosas que nos indique si tu política cultural va por buen camino.

Una política cultural es un documento en el cual se enumeran aquellas acciones que una organización (en nuestro caso, el Ayuntamiento) realiza para regular, proteger, fomentar y secundar económicamente las actividades relacionadas con las artes y sectores creativos. En ese documento aparecerían los datos, es decir los indicadores, que nos permitirían medir el estado del sistema cultural de nuestro municipio, o lo que es lo mismo: nos permitirían obtener una radiografía de la salud cultural de nuestro pueblo, y después, con esa información, las personas con responsabilidad política decidirían como gastar e invertir el dinero. A este proceso se le llama planificación y es básica para el buen funcionamiento de cualquier gobierno.  Planificar tus acciones para mejorar el funcionamiento de tu sistema cultural tendría que ser la prioridad de la persona que tiene la responsabilidad de dirigir el departamento de cultura, es decir, de la responsable política. Es más, a nuestro entender, tendría que ser prioritario para el alcalde.

Un pueblo con un sistema cultural fuerte es un pueblo feliz. Con arraigo, con identidad, con creatividad y con salud. Así lo entiendo yo y así lo reflejamos en nuestro programa. No estoy descubriendo América con esto de la planificación, en nuestro Ayuntamiento saben de la importancia de planificar, de redactar planes. Solo así se han conseguido los fondos europeos. Tenemos planes en las áreas de Igualdad (aprobado en marzo del 19), en Juventud (aprobado en mayo de la este año), en Turismo (lo primero 2016-20 y el actual 2021-24), en Urbanismo (PMUS, aprobado en noviembre del 19), etc. Planes tenemos (otra cosa es que se ejecutan), pero parece ser que el área de Cultura no es prioritaria, aquí no quieren planificar. Nuestro grupo pidió un Plan Municipal de Acción Cultural en septiembre del 2020 y se aprobó por unanimidad, junto a la creación del Consejo Municipal de Cultura. Pero no es prioritario. No está en presupuestos. No lo estuvo en el 21, no lo estuvo en el 22 y no lo está para el 23.

Otra acción que demostraría que la cultura importa para nuestro equipo de gobierno sería la contratación de una persona técnica de cultura (cosa que también hemos propuesto mediante moción y en presupuestos). Las áreas de juventud, igualdad y deporte la tienen, y todos y todas hemos podido apreciar la mejora en la gestión de éstas. No digo que estemos en total acuerdo con las políticas del PP municipal, pero sí que estamos de acuerdo en que disponer de una persona responsable técnica y de un Plan de Acción en cualquier área de gestión, ayuda mucho a una correcta gobernanza. Y por supuesto, en cultura, también.

Pero volvemos a los indicadores. Hay de muchos tipos, como, por ejemplo, el económico, es decir, la cantidad de dinero gastado e invertidos en cultura, que es el que habla de la estructura de la política cultural local. Por otro lado, hay indicadores de modelo y estilo de política cultural, que son los que analizan la programación: quien la paga, quién la decide, nivel de participación ciudadana o profesional en esta decisión, etc. Y después existen otro tipo de indicadores, que hablan de la incidencia de esta programación en la sociedad, como son: la satisfacción de los derechos culturales, la cultura y el sistema económico, la cultura y la articulación social, la cultura, la salud y el bienestar, la cultura y la educación y, finalmente, la cultura y los Objetivos del Desarrollo Sostenible (ODS). Con todo esto no pretendo abrumar a quién nos lee, sólo pretendo dar cuenta de la complejidad del sistema cultural local y su medición. Una tarea complicada, pero no imposible ni alienaajena a personal habituado a trabajar por planes y proyectos. Y detallo todos los tipos de indicadores porque quiero evidenciar que hay muchos ámbitos en los cuales se puede actuar mediante la política cultural; que un buen diagnóstico, hace que tomemos buenas decisiones a la hora de gastar e invertir el dinero público, no dejando al arbitrio de políticos la programación cultural del pueblo. Como muy bien dice nuestra regidora de hacienda (que casualmente es la de cultura), las necesidades son infinitas y los recursos limitados. Por eso es muy importante tener claro el diagnóstico que pueda hacer de nuestro sistema cultural local, un o una buena profesional del sector, porque nos ayudaría a focalizar mejor los limitados recursos de que disponemos. Además, establecer un sistema de indicadores de medición (que es lo que se hace en una buena planificación) nos permitiría conocer si se han cumplido los objetivos, si ha servido de algo las acciones llevadas a cabo con el dinero invertido y gastados. Cosa que tendría que hacerse por pura responsabilidad política. Porque errar, podemos errar todos y todas, pero denota sabiduría poder rectificar y, sobre todo, hacerlo en base a datos.
En estos momentos, después de haber aprobado los presupuestos en el último Pleno Ordinario, celebrado el pasado 30 de noviembre, podemos compartir con los lectores y lectoras las previsiones de gastos e inversiones que el equipo de gobierno ha asignado para el área de cultura para el año próximo. En la siguiente tabla vemos cómo han decidido repartir los limitados recursos para cubrir las ilimitadas necesidades.


Bien, en esta tabla vemos que del 100% del dinero que gastaremos en programación cultural (capítulo 2), el 74% va para fiestas. También observamos que del 100% de las ayudas que se destinan a asociaciones y personas físicas para el ámbito de la cultura, el 53% va para fiestas. Con esto no estamos juzgando si las fiestas se merecen o no la cantidad de dinero asignada, lo que juzgamos es la necesidad que existe de cubrir otros ámbitos de la cultura, para los cuales no queda demasiado margen.
Éste es uno de los motivos por los cuales nuestro grupo municipal no votó a favor de los presupuestos del PP. Pensamos que hay que rediseñar la distribución de los recursos para cultura, que hay que contar con la participación activa de la ciudadanía para este rediseño y que todo este proceso tiene que ser transparente. Las empresas culturales del municipio tendrían que disponer de un calendario anual de acontecimientos para poder adaptar sus servicios, para poder proponer en el ayuntamiento colaboraciones así como poder sentir cierta satisfacción y orgullo de pueblo; las asociaciones culturales (todas las que están activas) tendrían que poder contar con su partida presupuestaria, bien en forma de convenio, bien en forma de subvención o mediante contrato, además de recibir ayuda para poder gestionar todas sus actividades; todas tendrían que poder disponer de infraestructuras de ensayo y exhibición; la ciudadanía tendría que poder solicitar cualquiera de las infraestructuras disponibles y para lo cual tendría que estar publicado un protocolo de solicitud con unos criterios iguales para todo el mundo. Ni que decir tiene, que para nosotros es de vital importancia impulsar toda la labor que se hace en cuanto a arqueología y etnología. Por eso propusimos para los presupuestos del 23, un plan de márquetin específico para esta área.


Sinceramente, no invertir en la consolidación de nuestro sistema cultural local, reforzándolo y dejando que maduro y sea autónomo, es querer continuar teniéndolo en un puño para continuar controlándolo. Nuestro grupo tiene muchas iniciativas que nos gustaría poner en marcha en el ámbito de la cultura y la primera es ésta: reforzar el sistema cultural local, que es reforzar todo aquello que tenga que ver con la cultura de nuestro pueblo; inventariarlo, establecer criterios y protocolos de aprovechamiento de recursos (tanto económicos como de espacios y personales), redactar planes que facilitan la labor asociativa y que atraiga actividad creativa, etc.

No he hablado en este artículo sobre turismo, que es un sector económico consolidado en nuestro municipio, porque quería centrarme en nosotros, en la gente del pueblo. Tenemos claro que las estrategias turísticas pueden ayudar a nuestro sistema cultural, pero más claro tenemos que nuestra Cultura puede hacernos únicos y diferenciarnos del resto de destinos turísticos. Tenemos la suerte de vivir en un pueblo rico en Cultura.

ANA MARTÍN
TÉCNICA DE CULTURA
CONCEJALA DEL AYUNTAMIENTO DE ALCALÀ DE XIVERT

 

Fuente: presupuesto previsto para el 2023 aprobado en Pleno, en Noviembre del 22